No se olvidan de las víctimas

Sincelejo. En una mañana de reflexión, en donde no se olviden los actos de violencia, pero que sí se cicatricen las heridas, se convirtió el acto de presentación oficial del monumento a las víctimas de la violencia “Memoria de las cicatrices”, ubicado en la entrada del bloque A, en Cecar.

Las "Mujeres Tejedoras de la Memoria" ofrecieron una ofrenda floral a las víctimas, que fue colocada en el muro.
"Las desapariciones, las muertes, nuestros familiares aún siguen en nuestras mentes", puntualizó Alice Vargas Vergara, vicepresidenta del grupo de Mujeres Tejedoras de la Memoria.

"Sufrir por un hijo desaparecido es algo que nunca pensábamos que nos iba a suceder, ya que somos personas de bien y de buenas costumbres", dijo Vargas, quien recordó que perdió a su hijo, Jorge Alejandro Hernández Vargas, cuando tenía 20 años, en el 2000 y 11 años después aún no conoce la verdad de su desaparición.
"No matan a los que se van, sino a los que quedamos", añadió con voz entre cortada.
La obra
"Memoria de las cicatrices", autoría del maestro Juan Ibáñez Torres, es una escena cruda que se trabajó durante nueve meses.
"Hemos recreado una de las tantas escenas trágicas de la violencia en donde seres masacrados levitan hacia el sol en busca de justicia. También la componen escenas de corralejas, de peleas de gallos, fandango, de las personas que se llevaban en hamacas, de los muertos que eran trasladados en Johnson para no hacer ruido", explicó.
A cicatrizar
Por su parte, monseñor Nel Beltrán Santamaría, obispo de Sincelejo, quien estuvo presente en el acto, invitó a la ciudadanía a no olvidar, pero a cicatrizar. A que no mantengan vivas las heridas, porque se infectan y no son buenas para la salud.
En medio del acto se soltaron globos blancos como símbolo de paz.
Entre tanto, las "Mujeres Tejedoras de la Memoria" colocaron una ofrenda floral frente al muro. En ese momento las lágrimas se apoderaron de ellas.
"Memorias de las cicatrices" es un homenaje, entre otras, a víctimas de la masacre de El Salado (Carmen de Bolívar), de Chengue (Ovejas), La Siria (Toluviejo), Macayepo (Carmen de Bolívar), finca La Alemania (San Onofre) y Chalán.