Fredy Chamorro Tovar, tuvo la original idea de escribir, el libro “El Hamakasutra”, manual ilustrado de técnicas para hacer el amor en hamaca.
El libro, tiene 73 páginas ilustradas sobre la manera como disfrutar del sexo en la tradicional hamaca.
“Este libro se me ocurrió, porque se ha escrito mucha poesía, mucha literatura sobre la hamaca, pero desde el punto de vista erótico nadie había escrito. Yo creo, que la hamaca de por sí es erótica y se me ocurrió la idea, después de vivir una cantidad de experiencias en torno a la hamaca de escribir este libro”.
En el libro se puede encontrar desde una breve historia sobre la hamaca, hasta las técnicas de movimiento y penetración.
“El libro tiene dos elementos interesantes, uno, es la historia de la hamaca, que muy pocas personas conocen y el otro es el erotismo, desde luego similar al Kamasutra”.
En el manual están bien explicadas las técnicas de calentamiento como; “El Cepo”, “La Colombina”, “La Sierra Roma”, “El Mordisco de Mulo” y “El Machete de Terciopelo”.
También las técnicas de movimiento y penetración como; “Carrera a Caballo”, “Tiro al Negro”, “La Mecedora”, “El Burrito Sabanero” y “La Revolcada”, entre otros.
“El libro, desde luego, tiene una connotación científica, por un lado y sobre todo de gran humor, porque el libro es realmente humorístico”.
Pero obviamente, este libro fue escrito, con conocimiento de causa del autor.
“Yo cuando me casé a los 17 años no tuve cama sino que, compré una hamaca y durante aproximadamente 4 o 5 años estuve viviendo con mi esposa en la hamaca”.
Al final del libro se encuentran las recomendaciones finales. Todas ellas para tener en cuenta, como por ejemplo: “Si cuando se acuesta en una hamaca usted siente mareo o nauseas, lamento decirle que no es apto o apta para practicar estas técnicas y deberá privarse de esta experiencia, a menos, que, se someta a un tratamiento médico que le quite el problema”.
Pero sin duda alguna, la recomendación más importante radica en el origen de la hamaca. Deberá ser sanjacintera o en su defecto de Morroa y nueva. Dice el autor que las hamacas de cestas regiones costeñas están hechas para el “ajetreo”.
El libro, tiene 73 páginas ilustradas sobre la manera como disfrutar del sexo en la tradicional hamaca.
“Este libro se me ocurrió, porque se ha escrito mucha poesía, mucha literatura sobre la hamaca, pero desde el punto de vista erótico nadie había escrito. Yo creo, que la hamaca de por sí es erótica y se me ocurrió la idea, después de vivir una cantidad de experiencias en torno a la hamaca de escribir este libro”.
En el libro se puede encontrar desde una breve historia sobre la hamaca, hasta las técnicas de movimiento y penetración.
“El libro tiene dos elementos interesantes, uno, es la historia de la hamaca, que muy pocas personas conocen y el otro es el erotismo, desde luego similar al Kamasutra”.
En el manual están bien explicadas las técnicas de calentamiento como; “El Cepo”, “La Colombina”, “La Sierra Roma”, “El Mordisco de Mulo” y “El Machete de Terciopelo”.
También las técnicas de movimiento y penetración como; “Carrera a Caballo”, “Tiro al Negro”, “La Mecedora”, “El Burrito Sabanero” y “La Revolcada”, entre otros.
“El libro, desde luego, tiene una connotación científica, por un lado y sobre todo de gran humor, porque el libro es realmente humorístico”.
Pero obviamente, este libro fue escrito, con conocimiento de causa del autor.
“Yo cuando me casé a los 17 años no tuve cama sino que, compré una hamaca y durante aproximadamente 4 o 5 años estuve viviendo con mi esposa en la hamaca”.
Al final del libro se encuentran las recomendaciones finales. Todas ellas para tener en cuenta, como por ejemplo: “Si cuando se acuesta en una hamaca usted siente mareo o nauseas, lamento decirle que no es apto o apta para practicar estas técnicas y deberá privarse de esta experiencia, a menos, que, se someta a un tratamiento médico que le quite el problema”.
Pero sin duda alguna, la recomendación más importante radica en el origen de la hamaca. Deberá ser sanjacintera o en su defecto de Morroa y nueva. Dice el autor que las hamacas de cestas regiones costeñas están hechas para el “ajetreo”.
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